Con Almudena Cacho desde las ondas de Radio Euskadi. Recetas sencillas y quedonas. A las 12,40h hablando de crustaceos y demás.
Langosta nada angosta.
Ingredientes
1 langosta de medio kilo.
80 gr de mantequilla
100 gr de cebollino fresco
Zumo de medio limón
Sal y pimienta blanca
Elaboración
Abrir la langosta (cortesía de Galder de Aurki) por la mitad a lo largo. Con un cuchillo afilado y grande mejor. Esta ha sido congelada ósea que el problema de matar al bicho no existe. Estos mariscos, básicamente todos, son muy sensibles al calor. Si tu sacas este vivo del frigorífico donde se conserva muy bien, es decir vivo, con un paño húmedo y una temperatura cercana a los 4-5 grados centígrados y lo dejas a temperatura ambiente, vamos a decir 27ºC, mueren en cuestión de un par de horas. Existen otros sistemas, lo mismo, pero al revés, dejarla medio congelada, pero el anterior es aún más sencillo.
Dicho esto, lo que queda por hacer es sencillo. Salpimentar el crustáceo. Planchar por el lado de la carne los dos lados de la langosta hasta dorar. Dar la vuelta y verter la mantequilla con el cebollino que antes hemos mezclado fundiendo la grasa y agregando la hierba durante cinco minutos. Dejar enfriar y añadírselo a la langosta. Rociar con algo de limón y tapar la sartén creando una especie de horno. El fuego, al mínimo.
Unas gotas de AOVE Dominus y unos bastones largos de cebollino remataran el plato. Sencillo.