La casa es el lugar elegido. Quizas porque en su interior hemos pasado, en los últimos meses, más tiempo del deseado. La parte más emblematica, la fachada. Os enseño cómo quedó.
La casa.
El lugar donde vuelves,
el sitio donde te reencuentras,
llovido de recuerdos,
de pesadillas, de besos,
de alaridos, de lágrimas vivas y
sonrisas sinceras
Plena de puertas oscilantes, de rombos de seis lados, de ventanas de asfalto.
Es el lugar donde cada uno respiramos magia, aleteo de agua tenue, vaporoso aire, hechizos de comida.